La moda de la calchemise: con los huevos colgando

By miércoles, abril 6, 2016 0 , , , , Permalink

Si hace unos años el mundo de las tendencias intentaba disimular la magnitud de la farsa, de un tiempo a esta parte nos trata sin tapujos como si fuéramos pigmeos evangelizables a los que cualquier engañabobos, por muy gordo y extravagante que sea, nos parecerá auténtico. Esta semana, la gran noticia referida a la moda ha sido la explosión en Francia de la calchemise, una prenda masculina que conjuga, en una sola pieza, la camisa de toda la vida con unos calzoncillos boxer. ¿Su cometido? Si la llevas con pantalones, la parte superior de la calchemise no se saldrá y evitará que airees la raja del culo cada vez que te inclines sobre la fotocopiadora. Si la llevas sin pantalones, la calchemise te hará parecer un auténtico gilipollas.

une-revolution-dans-la-mode-masculine-la-chemise-calecon-la-calchemise.334789

Digo lo de llevarla sin pantalones, porque la noticia aparecida esta semana en SModa (http://smoda.elpais.com/moda/calchemise-la-camisa-mas-calzoncillo-arrasa-francia/) se hacía eco de unas fotografías promocionales de la marca, en las que un hatajo de modernos corretean por las calles de París con la calchemise y poco más. A la brava. Sin pantalones. Evidentemente, las fotos no responden a ninguna tendencia, nadie va de esta guisa por la calle por muchas pelis de Wes Anderson que haya visto; sencillamente se trataba de imágenes picantonas y originales para promocionar esta parida de producto entre la gente cool.

Lo más asombroso del dislate es que, a raíz de estas imágenes luctuosas, mucha gente está dando por hecho que lo que se ha puesto de moda entre los adolescentes modernillos parisinos es lo de ir por el mundo solo con la calchemise, los cojones en modo péndulo bailando claqué, las ancas a la intemperie, ¡y con zapatos y calcetines! Diablos, hasta hay una estampa de uno de los modelos surcando las aceras subido a un skate, con el pirindolo moviéndose al ritmo del taca-taca, bajo el delicado body de acrílico. Aquí tenéis el link: www.calchemise.com.      

Qué caprichos tiene esto de la moda, ¿hum? Quizás por eso amamos tanto odiarla. A partir de una noticia inane sobre una prenda que en otros tiempos estaría relegada a afinadores de piano solteros de más de 45 años, se ha generado una tendencia donde no la hay, ni la habrá. Hemos convertido en moda la compulsión de un photographe vicioso con ganas muy locas de ver a unos cuantos efebos marcando mortadela en barra a calzón descubierto.

calche10

Lo cierto es que todas las webs del gremio sablean salvajemente la noticia de SModa y como los millennials no tienen por costumbre leer los artículos -salvo titulares, pies de foto y comentarios de otros lectores-, ¡boom!, todos convencidos por las fotos de que este verano hasta Pedro Ruiz irá en calchemise y con las criadillas colgando a comprar los Ducados. En cuestión de horas, ya hay gente que asegura haber visto a modernos con la calchemise y sin pantalones por la calle; da igual que estemos a 10 grados, da igual que mientan. De repente, media población masculina ha visto la luz: hay un hambre lobuna de calchemise. La broma de las fotos ha avivado una reivindicación que permanecía dormida en el inconsciente colectivo machorro, un atavismo masculino resurgente: el sacrosanto derecho a llevar los huevos colgando.

Todos convencidos por las fotos, de que este verano hasta Pedro Ruiz irá en calchemise y con las criadillas colgando a comprar los Ducados

La moda de la calchemise envía un claro mensaje al hombre de 2016: donde antes había cojones en compresión ahora hay albaricoques en libertad. Hay pocas cosas más inspiradoras que corretear por la oficina embutido en tu calchemise, exento de molestos pantalones, con los testículos meciéndose en el abismo, sin ataduras, al suave galope escrotal. El equivalente masculino al rebote hipnótico de dos tetas en movimiento ha llegado y no veo el confeti por ninguna parte. Nada se acerca a la belleza de un par de cojones y un manubrio bien cebado en movimiento, a esas líneas imposibles que la carn d’olla va dibujando en la tersa tela del calzoncillo-camisa. Llevar calchemise es no avergonzarse de ser un macho emocional, es abrazar la masculinidad y el heterismo desde la delicadeza y el sentimiento, es trazar en el aire las mismas parábolas escrotales que los bailarines clásicos ejecutan con sus prietas bolitas ante cientos de espectadores maravillados. ¡Soltémonos, joder!

12698153_1556768954615180_5952393338800145652_o

La calchemise como prenda única, sin pantalones, no es un atentado estético del cagarse, como muchos haters quieren hacernos creer. Es una celebración de la simiente, un garante de progenie. La proctología más avanzada ha demostrado que el apretón de los slips y los tejanos skinny abotarga a los espermatozoides; sin embargo, con la soltura que propicia esta prenda, lo pequeños volverán a nadar libres, enfervorizados… No habrá óvulo que se resista a esos renacuajos, tus huevos parecerán un estanque infestado de pirañas famélicas. 

De acuerdo, objetivamente, la calchemise es un invento espantoso. Para defecar tienes que romperte la camisa, como Camarón. Cuando te agachas, el calzoncillo se te hinca en la raja del culo hasta dejártela del color de un bogavante escaldado. No está hecha a prueba de flatulencias con trufa de regalo: si hay pedete, la camisa también paga los platos rotos. No obstante, la calchemise nos ha devuelto lo que era nuestro, nos ha permitido fantasear durante unos días con un retorno a los tiempos en que llevábamos los huevos colgando, apagábamos el fuego con nuestro chorro de orín y el mundo era un lugar mejor.

tumblr_m94vc8FDZo1rrvk2oo1_500

Por cierto, ya que en nuestro país tenemos una industria de la moda tan à la page, propongo que algún diseñador cool capitalino subvierta la fórmula original francesa, siguiendo escrupulosamente el libro de estilo ibérico. Nuestra repuesta a la calchemise hipster parisienne sería una cachemí castiza compuesta por una camiseta imperio amarillenta y un slip Abanderado de abuelo cosido a mano. Con el clásico agujero lateral para sacar la polla. Con calcetines de ejecutivo, liguero masculino y zapatitos Julio Iglesias etapa “Libra”. Y que Viva España, joder.

Aún no hay comentarios.

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *